Pete Hines, videpresidente de márketing de Bethesda, ha expresado sus reticencias a ser los primeros en trabajar en una consola "sin ver su forma final" en referencia a Wii U, la nueva consola doméstica de Nintendo.
Preguntado ante la posibilidad de ver alguno de los juegos de la compañía en la consola, Hines responde que "hasta ahora Wii no había encajado -con los planes-. Si lo hará Wii U en el futuro habrá que confirmarlo".
"No creo que la actual generación de consolas nos esté frenando. Aún hay mucho que hacer en lo visual, técnico y desde el punto de vista de la narración. Y hay ahora una gran audiencia -en estas consolas-".
"Los desarrolladores están intentando moverse en busca de nuevos objetivos técnicos. Una nueva consola no se muestra justo un año de su lanzamiento y no será exactamente así cuando salga a la venta. Evoluciona y cambia. E introducir -cambios- en los juegos que están en desarrollo es algo complicado. Es obviamente un riesgo".
Otro problema para Hines es que "la base instalada empieza de cero. Un número de personas la compra pero no será el mismo que la actual generación. Tienes dividido a tu público. En este caso: ¿vamos a hacer juegos para la próxima generación ¿O para la actual? ¿Y cuánta de la actual se moverá a la próxima?"
"Los cambios que se harán serán tecnológicos, en términos de lo que podremos hacer, serán emocionantes. Pero tienen un coste".
