La compañía Take-Two ha anunciado que no ha cumplido sus beneficios previstos para el segundo trimestre del año, y culpa por ello a las ventas de Max Payne 3 y Spec Ops: The Line, que al parecer han sido más bajas de lo esperado.
A pesar de ser dos de los "contribuyentes más fuertes al beneficio neto" en el primer cuarto del año fiscal, y habiendo distribuido tres millones de copias de Max Payne, Take-Two señala que "las ventas más bajas de lo previsto de Spec Ops: The Line y Max Payne 3" son razones claves de no haber cumplido sus objetivos financieros.
El director ejecutivo de Take-Two, Strauss Zelnick, asegura que "nunca antes había habido tanto interés por los próximos lanzamientos de la compañía [...], especialmente Borderlands 2, NBA 2K13 y BioShock Infinite", con los que "esperan que el 2013 fiscal sea uno de mejores años en la historia de Take-Two".