Sony ha defendido el creciente interés del mercado de los videojuegos en las consolas portátiles, pese a las voces contrarias que pronosticaban que acabaría siendo absorbido por smartphones y otros dispositivos, como las tabletas, en concreto en el caso del mercado japonés.
"Parece haber un cambio en los hábitos de los jugadores japoneses", indica Andrew House, presidente de Sony Computer Entertainment. "En los últimos cuatro o cinco años parece haber mucha más atención en las consolas portátiles y hemos visto cómo han crecido las ventas de PSP frente a las de PS3".
"Hablo con muchos editores y desarrolladores y la verdad es que creo que nadie entiende del todo qué está impulsando esa tendencia. La creatividad en el espacio portátil es un factor, pero no creo que sea la única razón. Podría estar vinculado a estilos de vida y que la gente pasa más tiempo yendo de un lugar a otro".
