The Witcher 2: Assassins of Kings ha recibido su actualización 1.1 y retira por completo todas las medidas de DRM que se integraban en el título, según ha comunicado CD Projekt, la desarrolladora.
El parche permite a los jugadores retirar la gestión de derechos digitales (DRM), de manera que se pueden realizar nuevas instalaciones y jugar en el título en la cantidad de ordenadores que se quiera.
"El objetivo es que aficionados y clientes se sientan felices y recompensarles por comprar el juego, y los sistemas DRM no apoyan nuestra filosofía", ha dicho Adam Badowski, director de desarrollo.
Para combatir la piratería "añadiremos más valor a la versión legal. Esto significa que tiene que ser superior en todo: menos problemas para usar e instalar, soporte completo, y acceso a servicios y contenidos adicionales."
Este parche, además, mejora la tasa de imágenes por segundo en un 30%, da más estabilidad, y amplía las opciones de configuración de teclado y ratón. También incluye el contenido descargable Troll Trouble, una misión adicional.
