La venta de cartuchos para ejecutar juegos piratas en Nintendo DS ha sido declarada ilegal en Reino Unido a través de una sentencia dictada por la Alta Corte británica, prohibiendo la importación, publicidad y venta de estos dispositivos.
La sentencia se ha dictado como resultado del juicio contra Playables Limited, quienes esgrimieron que estos dispositivos permitían la utilización de 'aplicaciones caseras', argumento que fue desestimado por los jueces.
Y es que, según reza la sentencia, puesto que para ejecutar el software casero es necesario primero saltarse las protecciones de la consola para que puedan ser operativas, eso convierte al dispositivo también en ilegal en esa vertiente.
Desde Nintendo se ha declarado que la compañía "promueve y fomenta el desarrollo de juegos y la creatividad, y apoya enormemente a los desarrolaldores de videojuegos que crean legítimamente nuevas e innovadores aplicaciones."
En Japón fueron declarados ilegales en febrero de este mismo año.
