Sony ha anunciado que va a reducir el número de compañías que le suministran componentes y demás elementos a la mitad antes de 2011, en un nuevo esfuerzo para reducir los gastos en 500.000 millones de yenes. En la actualidad, los costes asociados a la adquisición de materiales se estima en 2,5 billones de yenes.
Con este movimiento, prevén pasar de 2.500 suministradores a unos 1.200, de manera que los que queden les ofrezcan mejores precios, pero que se beneficien, a su vez, de vender más volumen en componentes y materiales. Esperan que Sony se beneficie de esta medida para reducir los costes de producción.
Se espera que con esta medida una de las divisiones más afectadas sea Sony Computer Entertainment, la dedicada a PlayStation, que contaba con una amplia libertad para obtener sus materiales. Con esta nueva política, en cualquier caso, Sony podría reducir sus previsiones de fuertes pérdidas para el presente año fiscal.
