El 15 de octubre de 1992 Sega lanzaba Mega CD en Estados Unidos bajo el nombre de Sega CD -a Europa llegaría en 1993-, un lector de CD que se complementaba con Mega Drive.
Este adaptador, del que se lanzaron dos modelos -el primero colocaba el lector bajo Mega Drive- debutó con un precio de 299 dólares y eliminaba una de las principales limitaciones de los cartuchos, su capacidad de almacenamiento, además de añadir algunas mejoras técnicas en cuanto a paleta de color o efectos, y la posibilidad de incluir sonido de mayor calidad o secuencias de vídeo.
Happy 25th Anniversary to the SEGA CD! Here's to the five of you that bought it. pic.twitter.com/GF6IXysUHg— Sonic the Hedgehog (@sonic_hedgehog) 15 de octubre de 2017
En su catálogo recibió algunas versiones mejoradas respecto a Mega Drive, con música de calidad CD, más animaciones o algún tipo de contenido extra, pero sin duda su mayor atractivo fueron las novedades como Sonic CD o Snatcher.
Sin embargo, el catálogo de Mega CD también fue acusado de recibir demasiadas "películas interactivas" que abusaban del FMV hasta el punto de convertirlo en su propia jugabilidad, caso de Road Avenger o Night Trap. Este último, con la polémica de sus imágenes explícitas -se acusó de "violencia contra las mujeres"-, fue el detonante para la creación del sistema de clasificación por edades ESRB.
Un fracaso comercial
En su momento fue considerado un fracaso comercial. Su precio -al que había que sumar el de la propia Mega Drive-, un catálogo no demasiado amplio y que fuese visto más como un dispositivo adelantado a su tiempo fueron los causantes de un éxito reducido.
Mega CD vendió 2,24 millones de unidades en todo el mundo, de las cuales 400.000 pertenecían a Japón -donde se puso a la venta en diciembre de 1991-.
No fue el único dispositivo de este tipo para los 16 bits de Sega. A finales de 1994 se estrenaría 32X, una consola que en este caso sí aumentaba considerablemente la capacidad de proceso respecto a Mega Drive.
