La UKIE, la patronal de la industria del videojuego en el Reino Unido, ha publicado un extenso informe sobre cómo el Brexit afectará a las compañías del país. Y es que, salvo un importante giro en la política británica, el país está decidido a abandonar la Unión Europa con un paso fundamental para avanzar en este camino que Theresa May podría activar el próximo martes.
Incertidumbre en la industria ante el Brexit
Este informe de la UKIE ha sido presentado ante los miembros del parlamento en Westminster y destaca el fuerte impacto negativo que el Brexit va a tener en las compañías tecnológicas del país. A través de una encuesta realizada a representantes de las empresas de videojuegos del Reino Unido se desvela que un 40% está considerando recolocar total o parcialmente sus empresas en otro país.
Además de encuestas, para el informe se ha recurrido a expertos económicos, encuentors profesionales y consultas directas con representantes de las 75 compañías integradas en UKIE. El informe no solo advierte sobre los peligros económicos y de aislamiento que el Brexit puede representar: también propone algunas medidas para mitigar los efectos adversos ante un proceso que parece definitivo. El impacto en la economía global británica puede ser considerable si tenemos en cuenta el elevado número de empleados en el sector de los videojuegos y el volumen de mercado global del sector.
El informe intenta recordar a los políticos la importancia económica de la industria del videojuego para la economía del Reino Unido porque "sabemos que los datos son esenciales para la politíca y queríamos que la información recogida en este documento informara sobre la dirección que la industria seguirá tanto en lo referente a las venideras negociaciones con la Unión Europea como en lo referente a convertirnos en una Gran Bretaña realmente global, hogar del mejor talento internacional, con pioneros e innovadores de las industrias creativas y tecnológicas", ha dicho Jo Twist, consejero delegado de la UKIE.
Mucho talento extranjero en el Reino Unido
El informe identifica cuatro áreas clara que serán vulnerables tras el Brexit: disponibilidad de talento, acceso al mercado international, regulaciones en el flujo de datos y acceso a financiación. Y es que el 61% de las compañías tiene empleados internacionales (un 35% de Europa y un 17% del resto del mundo), y, de hecho, el 40% ya ha notado que es más difícil atraer a talento internacional tras el resultado del referendo que aprobó el Brexit. "El Brexit se percibe como un debilitamiento del Reino Unido en cuanto a su atractivo como destino" para los profesionales del mundo, se indica en el informe.
Por tanto, hay un porcentaje muy elevado de trabajadores no británicos de alta especialización que podrían tener problemas para mantener sus trabajos. Se considera una prioridad básica poder garantizar que quienes ya estén trabajando en el Reino Unido puedan mantener sus empleos. De hecho, se considera igualmente crítico desarrollar la legislación necesaria para seguir atrayendo a profesionales de todo el mundo.
Financiación tras el Brexit
Más allá de los futuros problemas de tránsito de mercancías y posibles aranceles que se establezcan al abandonar la Unión Europea, la industria del videojuego considera muy importante el problema de la financiación para sus proyectos.
Consideran que es fundamental garantizar el acceso a financiación internacional y establecer nuevas vías de inyectar dinero en su economía. Y es que el Reino Unido, como en otros ámbitos, se nutre de una gran cantidad de fondos europeos para industrias tecnológicas, creativas y culturales. De hecho, el informe señala la enorme importancia que iniciativas europeas, como Creative Europe, han tenido para pequeñas y grandes compañías del país.
Los retos del Brexit
Noirin Carmody, uno de los rostros visibles de la UKIE, señala que "el Brexit presenta un gran número de retos en estas y otras áreas. Retos que afectarán no solo a la industria del videojuego sino a todos los sectores creativos y tecnológicos en los que se sustentan los videojuegos. Es, por tanto, vital que el gobierno considere cómo abandonar la Unión Europea afectará a estos sectores si el Reino Unido quiere seguir siendo líder en compañías creativas y de alta tecnología".
Carmody destaca igualmente que el objetivo último del informe es llamar la atención sobre estos problemas y no oponerse al Brexit, sino que "aporte datos valiosos y recomendaciones sobre vías de actuación que ayuden a los legisladores en los meses que sigan al artículo 50", es decir, la declaración de salida de la Unión Europea.
