Como todos sabéis, el DualShock 4 tiene una barra de luz en la parte posterior que por el momento no ha sido demasiada aprovechada, más allá de por algunos juegos y de manera un tanto anecdótica.
Para muchos jugadores esta luz es una especie de mal que quieren desactivar, pero Sony no lo permite. Por el momento, han conseguido poder ajustar su brillo, pero no apagar por completo. ¿Por qué Sony no quiere que apaguemos la luz?
La respuesta se llama Project Morpheus. Según Jed Ashforth, diseñador sénior de Sony Computer Entertainment Europe, la luz del mando está concebida para trabajar con el casco de realidad virtual, suponemos, ofreciendo información a la consola en colaboración con el futuro dispositivo a través de la cámara, pero hasta ahora Sony no podía revelar su auténtico propósito.