Análisis de Kengo Zero (Xbox 360)

La era de los samuráis irrumpe en Xbox 360 con nueve héroes de la historia de Japón.
Kengo Zero
·
Actualizado: 21:31 17/8/2020
GRÁFICOS
7
SONIDO
6
NOTA
5
DIVERSIÓN
4
JUGABILIDAD
5
Análisis de versión Xbox 360.

Los aficionados a la lucha con espadas tienen un buen motivo de alegría con Kengo Zero, uno de los pocos representantes del género en Xbox 360, y que desde luego no suelen llegar a los mercados occidentales, una creación de los nipones Genki en el que los combates en un ambiente tradicional japonés van a ser los protagonistas del título.

El juego está ambientado en el siglo XVII, extrayendo de la historia de Japón a nueve samuráis de la época, que sin duda alguna sonarán a los aficionados a estudiar el medioevo nipón, personajes de la época feudal que forman parte de los manuales de historia japonesa, como Musashi Miyamoto o Ito Ittosai. Por desgracia, su presencia se queda en poco más que el nombre, ya que el diseño de los personajes no ha logrado dotarles de una personalidad definida, aunque las voces de estos personajes, en japonés, sí ayudan un poco.



Pero en líneas generales, los diseños de los personajes son genéricos y parecen algo faltos de rasgos característicos, aunque sí se corresponden con el estereotipo de lo que podemos esperar en un juego del género, por lo que al menos resulta verosímil en este aspecto y ayuda a construir la atmósfera deseada. Nos quedará siempre, eso sí, el consuelo de poder personalizar a nuestro samurái, teniendo presentes varias consideraciones.

Así, cada samurái tiene tres posturas de lucha que van a determinar cómo se mueve ese luchador al atacar, y al cambiar sus movimientos de ataque podemos definir nuevos movimientos partiendo de una postura básica, todo ello desde la opcíon de Edit Character del menú del juego. Tenemos a nuestra elección ataques móviles, que se hacen pulsando el botón de ataque y el stick izquierdo al mismo tiempo, los ataques de fuerza (que se controlan por el tiempo durante el que se presiona el botón), los de avance (que implican abalanzarse sobre el enemigo para atacarles) y los de cambio de postura (que constan de movimientos en tres secuencias).

El modo de juego principal propone una campaña con cada uno de los nueve protagonistas, de manera que se desarrollan nueve líneas argumentales con diferentes situaciones en cada una. Eso indica la teoría; la práctica es bien diferente, y no hay ninguna diferencia que sea relevante o sustancial. De esta manera, el juego falla estrepitosamente a la hora de desarrollar una de sus premisas fundamentales, y los enfrentamientos continuados contra tíos brutos, ninjas y luego un enemigo final son la tónica generalizada de manera absoluta.

Los jefes finales serán ocho, en concreto los otros ochos luchadores, que estarán destinados a culminar cada una de las fases de este "yo contra el barrio" feudal, y una vez superado ese enfrentamiento contra el enemigo final será cuando se nos dé la opcion de personalizar a nuestro personaje, que hemos comentado más atrás. Las fases del juego son bastante cortas, aunque hay que reconocer que la ambientación está bastante lograda y resulta muy homogénea y consistente. Así, pasaremos por fortalezas o navíos, en entornos que, la verdad, resultan bellos. No es ningún hito dentro del catálogo de juegos de la consola, pues desde luego no fuerza el potencial de Xbox 360, pero el resultado global va a ser bueno.



Con tres niveles de dificultad, el título va bien surtido en ese sentido, y desde luego nos dará horas de juego. Se completa con los modos de juego adicionales, como el Combat Mode, el clásico versus, para jugar contra la máquina o contra otros jugadores humanos, pero destacada especialmente el Mission Mode, que nos propone hasta diez retos diferentes. Estos retos están limitados por el tiempo e incluye retos como matar a tres ronin, conseguir diez muertes especiales, o derrotar a 100 enemigos. Sorprendentemente, es el modo de juego más agradecido de todo el paquete de contenidos, sobre todo porque establece unos rangos y clasificaciones que se publican en Xbox Live y nos pueden tentar a seguir jugando.



Aun así, hay que tener presente que la estructura básica del juego es ir de un punto a otro matando a todo lo que se mueva, lo que es muy consecuente con el género, pero no consigue desprenderse de esa tónica en el Mission Mode, por lo que tampoco hay que confundirse: el juego no va a plantear algo sustancialmente diferente dentro de esa opción. De cualquier modo, si nos gusta el planteamiento de los combates, está claro que esto alarga un poco la vida del juego, aunque no podemos negar que resulta definitivamente escaso de modalidades.

Kengo Zero no consigue destacar dentro del género de la acción (que ha recibido un fuerte impulso en los últimos años, revitalizándose sustancialmente con respecto a la época de las 32 bits), y su jugabilidad se traduce en machacar los botones sin demasiado criterio, de manera que no consigue emular en ningún momento la sensación de estar peleando con espadas en un ambiente como el de la época que afirma recrear. El sistema de defensa es irrelevante, y en realidad si pulsamos compulsivamente los botones de acción (Y, B), tenemos unas muy elevadas posibilidades de victoria. Estos se complementa con unas animaciones pesadas, toscas aunque no mal realizadas, que impiden que el juego sea ágil y mantenga un ritmo intenso y constante, haciendo que la respuesta del personaje ante las órdenes del mando lleve algo de retraso.



El elemento más interesante de la jugabilidad es el aprovechamiento de los entornos para utilizarlos a nuestro favor, aunque no lo hace tan bien como otros juegos, y podemos tirarlos por acantilados o por un muelle, y aunque en ocasiones son espectaculares pueden resultar complicados de hacer, por lo que al final no compensa perder el tiempo en intentar realizar esas maniobras, cuando con un par de presiones de los botones obtendremos resultados más eficientes.

El título presenta un buen nivel artístico en sus personajes y entornos, aunque creemos que estos últimos son más destacables. La carga poligonal es baja, lo que se puede hacer muy evidente en ocasiones, y en realidad hay una tendencia hacia una sencillez y parquedad que no acaban de cuadrar en los planteamientos cada vez más barroquistas de las tendencias actuales. Kengo Zero cumple en este sentido, haciendo del visual su aspecto más destacado, pero si tenemos en cuenta lo toscas que pueden resultar las animaciones y que, de hecho, no acaba de aprovechar como debiera el potencial de Xbox 360, está claro que podría haberse hecho un trabajo más interesante a nivel técnico. La cámara, además, no siempre se sitúa en la mejor posición posible (de hecho, tiene bastantes problemas a la hora de buscar ángulo), y si añadimos que no se ha traducido al castellano, la presentación tampoco va a ser su punto fuerte.

La música se adapta bien al estilo de juego, y se funde con la acción, pero no consigue una personalidad propia ni recrear con toda la fidelidad que se podría exigir el ambiente de la época, aunque en líneas generales el resultado es positivo Por otro lado, las voces destacan por sus malas interpretaciones, y los efectos especiales son repetitivos y poco consistentes, sin dar una sensación de choque de acero, sin ir más lejos, lo que nos parece esencial en un juego donde las espadas son elementos omnipresentes, y lo mismo se puede decir de los grititos de nuestros enemigos.



Conclusiones

La idea de la que parte Kengo Zero es claramente atractiva, y creemos que llena de posibilidades que, está claro, no se han explotado de la manera conveniente. Anda escaso de modos de juego, y la ausencia de multjugador en línea no juega tampoco a su favor en una consola donde el aprovechamiento de Xbox Live es parte integral de la experiencia de juego en muchos títulos. La jugabilidad es tosca, sin acabar de resultar fiable su control, ni mucho menos preciso, y los enemigos tienen fallos evidentes en la inteligencia artificial, y en su desarrollo resulta repetitivo. Creemos, sin embargo, que por su temática y atractivo precio habrá jugadores que sepan perdonar sus carencias y disfruten de él sin complejos.

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Género/s: Acción / Beat'em up
PEGI +16
Plataformas:
Xbox 360

Ficha técnica de la versión Xbox 360

ANÁLISIS
5
  • Fecha de lanzamiento: 16/11/2007
  • Desarrollo: Genki
  • Producción: Majesco
  • Distribución: Proein
  • Precio: 34.95 €
  • Jugadores: 1-2
  • Formato: 1 DVD
  • Textos: Inglés
  • Voces: Japonés
  • Online: Sí
Estadísticas XBOX LIVE
COMUNIDAD
6

Kengo Zero para Xbox 360

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