John Carmack de id Software ha pedido perdón en la QuakeCon por los problemas de rendimiento que ha sufrido Rage en PC.
Cuando el juego se lanzó el año pasado hubo una gran cantidad de jugadores que no podían jugar por culpa de un problema de drivers, algo que se ha ido solucionando en cierto modo con el tiempo a base de parches.
Carmack dijo que estuvo satisfecho con la jugabilidad de Rage, pero que podrían haberse tomado más tiempo en algunas cosas, como en el sistema de guardado o en su pobre final. Pero lo que tachó de "inexcusable" fue que la mitad de los usuarios de PC no pudieran jugar al juego. "No hay forma de que no se nos critique por ello", dijo Carmack.
"Fuimos ingenuamente optimistas. Intentamos hacer que los drivers funcionaran según lo que habíamos supuesto, pero no fuimos lo suficientemente inteligentes para darnos cuenta del hecho de que la mayoría de la gente no tendría estos drivers".
Carmack ha prometido que en el futuro lo harán mejor. Actualmente todos los esfuerzos de la compañía están puestos en Doom 4.