Blizzard ha llevado a cabo una nueva expulsión masiva de usuarios tramposos en StarCraft II, que, como en anteriores ocasiones ha defendido alegando que "además de minar el espíritu de la competición que es esencial en Battle.net, hacer trampas y hackear puede afectar a la estabilidad y rendimiento del servicio."
No se trata de la primera vez que Blizzard lleva medidas similares en éste o en otros títulos. Se estima que más de 5.000 jugadores se vieron afectados en octubre, aunque por el momento no hay fechas aproximadas de los afectados en esta nueva tanda.