Sony retiró el soporte para la utilización de Linux a través de la opción Other OS cuando lanzó la revisión de su consola doméstica, el modelo PS3 Slim, y, posteriormente, la retiró también de los modelos originales que la incoporaban mediante una actualización del firmware de la consola en abril, lo que ya hizo que se presentara una demanda contra Sony en EE.UU.
Ahora se han presentado dos demandas más contra Sony en el país estadounidense por la eliminación de esta función de su consola. Una se ha presentado en la Corte del Distrito del Norte de California, y alega que Sony promocionó la funcionalidad de la instalación de Linux, que ahora ha retirado. Se trata de una demanda colectiva y "cada demandante compró una PS3 con la previsión justificada de que Sony seguirá dando apoyo a la función Other OS" y que no se eliminaría del sistema. Además, consideran que ha incumplido la legislación californinana sobre competencia desleal al anunciar características técnicas que han sido retiradas posteriormente. Solicitan el pago de daños y perjuicios, así como el pago de las tasas legales.
La otra demanda se ha presentado también en California, y se señala específicamente que Sony, al llevar a cabo este movimiento, ha dado a los consmidores "dos opciones igualmente indeseables: los usuarios pierden la habilidad de emplear otros sistemas operativos, una característica publicitada e importante, o pierden la habilidad de acceder a características en línea, Blu-ray y de juegos."
