Este título, que retorna a los orígenes de la serie, es decir, se ambienta en la Segunda Guerra Mundial (en 1943), permitirá que hasta 24 usuarios se enfrenten entre sí en algunos de los escenarios más populares del clásico Battlefield 1942, aunque con un renovado motor gráfico, el Frostbite, gracias al cual los jugadores disfrutarán de un notable grado de destrucción en los entornos.
El productor del juego, Gordon Van Dyke, ha comentado al respecto que cuando desarrollaron Battlefield: Bad Company, sintieron que los jugadores querrían volver a disfrutar de las batallas en la Segunda Guerra Mundial con la posibilidad de destrozar los entornos.