Microsoft podría tener problemas con la creación de la película en torno a Halo ahora que tanto Fox como Universal han abandonado las negociaciones.
La controversia se inició ya desde el primer guión a cargo de Alex Garland y el elevado precio, muy por encima de la media de otras películas en torno a licencias similares, a lo que se sumaba la exigencia de que Microsoft Game Studios y Bungie tuviesen control casi total sobre la parte creativa del proyecto.
Con todo, Fox y Universal habían llegado a un primer acuerdo en el que se unían para costear la película y distribuirla, aunque el pasado 15 de octubre los productores ejecutivos Peter Jackson y Fran Walsh solicitaron que sus contratos se mejorasen a las productoras cinematográficas. Sin alcanzar un acuerdo, Fox y Universal han abandonado el proyecto.
Por otro lado, los últimos rumores que señalaban que la película había disparado su presupuesto hasta superar los 200 millones de dólares (convirtiéndose en la película basada en un videojuego más cara de la historia), han sido negados oficialmente por un represante de Jackson y Walsh a la revista especializada Variety.
Pese a la salida de las productoras, los preparativos de preproducción siguen adelante en los estudios neozelandeses de efectos visuales Weta Digital y Weta Workshop, compañías de Peter Jackson que éste fundó para su trilogía de El señor de los anillos.
Microsoft, por su parte, habría comenzado ya a negociar con otras distribuidoras, mientras prepara las nuevas entregas de la saga: Halo 3, juego de acción en primera persona; Halo Wars, título de estrategia en tiempo real; y la obra interactiva que creará Peter Jackson y de la que todavía no se han desvelado detalles concretos.
