Conversar con la comunidad de jugadores de un juego no es sencillo. Así lo ha reconocido Jeff Kaplan, director de Overwatch en Blizzard, que recuerda que existen ciertos frentes de jugadores que se dedican a perseguir a los desarrolladores en los foros provocando situaciones de tensión.
El frente tóxico de la comunidad
"Desde el primer día quisimos plantear un desarrollo abierto con un equipo de producción comunicativo con nuestros jugadores, y si me permites hablar con transparencia por un momento, es algo que asusta. Por norma general, la comunidad es fantástica. Pero existen algunas personas con malos modales por ahí", explica el jefe del exitoso juego.
Kaplan apunta que los desarrolladores de Overwatch "tienen la libertad" para hablar a los jugadores. "Lo terminamos haciendo solo unos pocos porque es muy intimidante y consume mucho tiempo. Es muy fácil publicar algo erróneo o hacer una promesa a la comunidad que no se quería hacer", comenta el miembro de Blizzard sobre la atención a los jugadores.
El director del shooter por equipos destaca que cuando un desarrollador habla en público, lo hace con toda transparencia exponiendo su imagen, algo que no sucede con los jugadores que mantienen el anonimato y lo usan para atacar a los profesionales, llegando incluso a "ataques de corte personal y a amenazas".
"Muchos de los desarrolladores que conozco prefieren centrarse en hacer juegos porque la parte de tratar con la comunidad puede ser muy intimidante. A veces se interpreta como un territorio donde tienes todas las de perder", concluye.
Recientemente se ha abierto el debate sobre la transparencia de los desarrolladores con respecto a la comunidad y cómo la toxicidad hace que los profesionales prefieran mantenerse lejos de foros y redes sociales.
