Las pesadillas infantiles son la base de Bax & Rowny, uno de los cuatro juegos que están desarrollando los alumnos de los másteres de videojuegos de U-tad. En este caso se trata de 16 alumnos que forman el estudio Starquake Games.
Bax & Rowny (que se dio a conocer inicialmente con el nombre Project Nightmare es un juego para un jugador pero multipersonaje en el que los dos protagonistas, dos muñecos de peluche, se meten en el mundo de las pesadillas infantiles y deben cooperar para llevar la aventura a buen término.
Los dos van combinando sus distintas habilidades tanto en el combate como en los puzles. Uno de ellos es Bax, un oso bastante agresivo, fuerte en el combate cuerpo a cuerpo y capaz de realizar "combos lentos y devastadores". El otro es Rowny, un conejo especializado en la lucha a distancia que lleva como arma un arco que irá mejorando a lo largo del juego hasta el punto de que podrá usar proyectiles de fuego o aumentará el número de saetas que lanza simultáneamente (a costa de precisión en el tiro). El oso también irá teniendo mejores habilidades y armas.
Cambio entre personajes según lo requiera la situación
La idea del juego, explican sus creadores, es cambiar de un personaje a otro según lo vaya requiriendo la situación. Así, si en un combate Bax está sobrepasado, cambias a Rowny y buscas desde una posición más elevada algún punto débil del enemigo, ya sea atacando directamente con el arco o utilizando algún elemento del escenario.
Un ejemplo de esta situación sería que Bax lance un bidón con líquido explosivo al enemigo y Rowny lo haga estallar con una flecha. El estudio afirma que algunos rivales serán pura carne de cañón, pero para los jefes será necesario pasar de un personaje a otro buscando debilidades ajenas. Tal como está definido en estos momentos el diseño del juego, se puede cambiar en cualquier momento de protagonista.
Starquake Games se planteó en los momentos iniciales la posibilidad de que Bax & Rowny tuviese una opción para jugarlo en cooperativo, pero el estudio decidió finalmente centrarse -de momento- en lograr un juego divertido para una persona.
Hay que buscar la compenetración entre las habilidades de los protagonistas en cada momento
Aunque Bax & Rowny va a estar más orientado al combate, esta sinergia entre los protagonistas sirve también para resolver puzles, ya que la visión de Bax es más cercana, mientras que Rowny, situado en una posición más elevada, tiene otra visión más completa del escenario. Y parece que los cambios entre ellos serán constantes, ya que a lo mejor Rowny es capaz de ver el punto débil y Bax tiene que colocar al enemigo en una posición determinada para que su compañero lo ataque y debilite lo suficiente como para que el plantígrado lo remate.
Estos cambios constantes en el gameplay son una de las mejores bazas del juego para Guillermo Jiménez-Ortiz, director del máster en Game Design de U-tad, aunque deben ir acompañados de la necesidad de que el cambio entre personajes consiga que las mecánicas sean divertidas y que se creen situaciones logren la sinergia entre los personajes y "conseguir un sistema de combate con la suficiente personalidad para que resulte original", afirma.
El estudio está trabajando en esto y, sostiene Javier Hernando, diseñador del juego, en que los personajes estén nivelados, de forma que necesites utilizar tanto al conejo como al oso. Un último reto para el estudio es definir qué está haciendo un personaje mientras el jugador controla al otro.
Un osos y un conejo luchando contra las pesadillas infantiles
El mundo de juego tiene un trasfondo infantil -no en vano los protagonistas son los típicos peluches que todos los niños tienen en sus camas para dormir-, pero con una temática adulta; las cavernas por las que avanzan los personajes son siniestras -aunque también habrá elementos propios de una habitación infantil- y sus combates serán bastante cruentos.
"Trabajamos con muchas ideas, y al final nos decantamos por una destinada a un público adulto pero que tratase de un tema que hemos tenido todos en común", cuenta Hernando. "Y todos hemos tenido, en algún momento de nuestras vidas, pesadillas. Todos hemos llamado a nuestras madres para que nos tranquilizasen. En definitiva, se trata de machacar a todos aquellos que nos asustaron de pequeños", añade.
En Bax & Rowny el jugador se enfrenta a sus peores pesadillas infantiles y las combate precisamente con los seres con los que nos sentíamos seguros cuando éramos niños; Hernando cuenta que su hermano pequeño colocaba un oso de peluche al borde de la cama para que el monstruo que viniera por la noche se entretuviese con él mientras le daba tiempo a llamar a su madre. La historia no está todavía definida, aunque en principio tratará de una niña que es secuestrada y sus peluches se dirigen al rescate.
Elementos de la infancia sacados de contexto
Se produce así un antítesis visual entre unos muñecos de aspecto encantador y un entorno amenazador. El artista Antonio Dios explica que el estudio buscaba ese contraste "entre los peluches que son del mundo de la realidad, que defienden a la niña y sus pesadillas. Por eso la luminosidad de los peluches. En su personalidad sí se va a ver reflejado que son buenos, pero disfrutan matando esas pesadillas. Van a ser el tipo de héroe que, si hay que pelear, se pelea", dice.
Guillermo Tostón, director del Máster de Arte y Diseño Visual de Videojuegos de U-tad, cree que uno de los retos estéticos de Bax & Rowny va a ser hacer entender de un vistazo, sin mucha explicación, esa intención del equipo de que el jugador recuerde que los peluches protagonistas formaban parte de su infancia, aunque confía en esa dualidad que busca Starquake Games.
Esa descontextualización de elementos de la infancia y lo que pueda suponer para mecánicas de juego innovadoras es también una de las características que más convence a Javier San Juan, director del máster en Programación de Videojuegos, del proyecto, aunque añade que hay que definir bien a qué tipo de jugador va dirigido precisamente porque por un lado tiene aspecto infantil y, por otro lado, más adulto.
Starquake Games está compuesto por 16 personas: los programadores Manuel Castilla, Diego Calvo, Juan Escudero, Ignacio Peña, Paco Puertas y Paris de Pérez; los diseñadores Iñaki Irizar, Javier Hernando, Pedro Montoto, Matheus Passos y Guillermo Zato y los artistas Pablo Huerta, Antonio Dios, Raoni Rodríguez, Rafa Machó y Julia Morant. El estudio tiene previsto lanzar Bax & Rowny en PC, Switch y PS4.
