ESEA, una de las plataformas de juego de Counter-Strike: Global Offensive (CS:GO) más importantes, sufrió la semana pasada un ataque informático.
El causante pide a la compañía 100.000 dólares para no filtrar en la red los correos electrónicos y contraseñas robadas, así como los datos bancarios de los usuarios.
Ignoran su chantaje
La compañía, por su parte, ha afirmado que la prioridad principal ha sido la de solucionar el error de seguridad e identificar los datos a los que el hacker habría tenido acceso. Así mismo, ESEA se ha puesto en contacto con el FBI para investigar de forma conjunta el suceso.
Según leemos en Vandal Sport, la compañía ha seguido recibiendo amenazas del chantajista, pero ha hecho caso omiso de ellas. Finalmente, el hacker decidió liberar toda la información que había recopilado de 1,5 millones de usuarios en la web Leaked Source.