Los analistas de DFC creen que NX, la próxima consola de Nintendo, no debería lanzarse en 2016, algo que les parece que puede ser un mal movimiento para la compañía japonesa pues no prevén que sea hasta 2017 cuando el sistema pueda ganar impulso. Eso sí, admiten que según se amplíe la información disponible (que, salvo rumores, en estos momentos es prácticamente inexistente) podrían volver a evaluar su dictamen.
La razón principal por la que DFC considera que 2016 puede ser mal año para que Nintendo lance su nuevo sistema es que está previsto que durante el año se lancen propuestas de hardware fuertes, vinculadas particularmente con la realidad virtual. Además, el desembarco de un nuevo sistema -que asumen que será una consola doméstica- perjudicaría a Wii U.
"DFC cree que si Nintendo lanza un nuevo sistema en 2016 sería un error y que bajo ninguna circunstancia Nintendo NX tendría un impacto en el mercado hasta avanzado 2017", han señalado en un informe remitido a los inversores.
"Por supuesto, nuestra opinión puede evolucionar según se desvelen detalles sobre precio y fechas de lanzamiento, pero 2016 se prevé como un año récord para la industria del videojuego. Si revisamos 2015, PlayStation 4 ha cumplido nuestras previsiones mientras que Xbox One y Wii U han quedado un poco por debajo. Para el futuro, DFC cree que el lanzamiento potencial de un nuevo sistema de Nintendo, así como de nuevos dispositivos de realidad virtual, en especial PlayStation VR, tendrá un impacto negativo en Xbox One y Wii U".
Y es que, según señalan, "el mercado está listo para que PlayStation 4 tenga ventas más fuertes y las previsiones se han incrementado en consecuencia".
Hay que tener en consideración que, en relación a NX, solo está confirmado que el sistema será desvelado este año. Nintendo no ha indicado en ningún momento una fecha de lanzamiento, pero los rumores fluctúan entre un debut a finales de 2016 o ya en 2017. En cualquier caso, con la dinámica actual del mercado, parece que no tendría sentido presentar una consola este año y que no se materialice comercialmente hasta más de un año después.
