Tras la emisión de un programa de la BBC llamado Watchdogs en el que se criticaba la política de Sony con respecto a los casos de fraude en PlayStation Network, la compañía japonesa ha asegurado que revisará sus procedimientos.
El programa mostraba a dos usuarios cuyas cuentas fueron hackeadas, y que vieron cómo se hacían compras a su nombre sin su permiso. Incluso tras demostrar que éstas no fueron lícitas, Sony bloqueó las cuentas pero no permitió a los afectados recuperarlas ni les devolvió el dinero.
Sony ha reconocido los errores de su política, y ha afirmado que no sólo rehabilitará las cuentas de los mencionados usuarios y les devolverá los gastos cargados a su nombre, sino que también modificará la política vinculada a estos casos para evitar que puedan volver a repetirse.
La compañía, en cualquier caso, pide a sus usuarios maximizar las precauciones y no introducir los datos de sus cuentas en ninguna plataforma no oficial o mínimamente sospechosa.