Valve y la ESL (Electronic Sports League) han realizado múltiples expulsiones que han resultado en la descalificación de tres equipos de Counter-Strike: Global Offensive del próximo evento de calificación para el evento ESL One Katowice 2015, de Polonia, que tiene una bolsa de premios de 250.000 dólares. Las penalizaciones aplicadas a los jugadores les inhabilitan durante, al menos, un año.
El comunicado oficial indica que los equipos expulsados son Epsilon eSports, ex-ESC Gaming y WinneR al descubrir que han amañado partidas.
Los tres equipos (que suman una lista completa de 14 de jugadores) no podrán competir en partidas de Counter-Strike: Global Offensive en todo lo que resta de 2015, como mínimo. "Las penalizaciones son indefinidas y no se volverán a evaluar antes de 2016", ha dicho Valve. La investigación sigue abierta y al menos cinco usuarios más están todavía bajo sospecha.
Hay que tener en cuenta que este tipo de ligas y eventos atraen a jugadores profesionales y que esto implica que hay múltiples intereses económicos implicados, más allá de los de la propia competición y, en ocasiones, apuestas. "Los jugadores profesionales, los equipos y cualquiera implicado en la organización de eventos de Counter-Strike: Global Offensive no deberían bajo ninguna circunstancia apostar en partidas de Counter-Strike: Global Offensive o asociarse con quienes realizan grandes apuestas o dar información a otros que pueda influir en sus apuestas".
La investigación se inició en verano cuando se descubrió que se había amañado una partida entre iBUYPOWER y NetcodeGuides.com.