Electronic Arts ha revelado que más de 1,7 millones de personas han jugado la beta de Battlefield Hardline, el shooter de Visceral Games, y que su opinión ha sido clave también para el retraso del juego.
Aseguran que la gente dio muy buenas ideas y opiniones, y que una de las más importantes fue que el juego seguía siendo un shooter militar, y que las nuevas facciones, "policías y ladrones", no terminaba de destacar.
Así, después de que EA y Visceral discutiesen el asunto, decidieron retrasar Battlefield Hardline a 2015 para innovar en el multijugador, mejorar la profundidad de la línea narrativa para un jugador y mayor estabilidad para evitar problemas de cara al lanzamiento.