El dúo ToeJam & Earl, protagonistas de los videojuegos ToeJam & Earl de Mega Drive (1991), su continuación directa ToeJam & Earl in Panic on Funkotron (1993) y ToeJam & Earl III: Mission to Earth (Xbox, 2002), pudieron haber sido las mascotas de Sega, aunque la empresa rechazó a los personajes por ser "demasiado americanos".
Sam Pettus, autor del libro Service Games: The Rise and Fall of Sega, desvela ahora que la compañía optó por escoger a Sonic como su mascota oficial en detrimento de estos alienígenas. El relevo se tomaba de Alex Kidd, que no había conseguido hacer sombra en popularidad a Mario, de Nintendo.
Pettus explica que Hayao Nakayama, presidente de Sega en aquellos años, estuvo muy cerca de escoger a esta pareja de personajes. "Varias propuestas se presentaron y fueron rechazadas", adelanta Pettus, quien destaca que una de las ideas "más próximas a ser aceptadas fue la de un americano".
Según relata, "la propuesta del programador Mark Voorsanger era un par de alienígenas funkadélicos [de "funk" y "psicolélicos"] llamados ToeJam y Earl, que eran muy guays. A Nakayama le gustaban la idea y el juego, pero tenía dos problemas con todo esto. El primero es que ToeJam y Earl eran demasiado 'relajados' para su sensibilidad. El segundo es que eran demasiado americanos en su concepción. Fue un gran esfuerzo, pero Nakayama quería una mascota con atractivo mundial".
Pese a que fueron rechazados como mascotas de Sega, se consideró que eran personajes atractivos y se aprobó el desarrollo de su videojuego.
