Muchos jugadores están quejándose de problemas de rendimiento en la versión de Xbox One de Call of Duty: Ghosts tras el parche de estabilidad que recibió el juego recientemente.
La mayoría de las bajadas en la tasa de imágenes por segundo ocurren en Stonehaven y según ha informado Digital Foundry, el juego baja hasta los 46 fps cuando se muestra todo el nivel y hasta casi los 30 cuando miramos a través de la mira de un rifle francotirador. Además, también cuenta con ciertos problemas con la sincronización vertical.
Call of Duty: Ghosts se puso a la venta en PC, PlayStation 3, PlayStation 4, Xbox 360, Wii U y Xbox One a finales del año pasado. El juego ha sido desarrollado por Infinity Ward y si queréis conocer más detalles sobre él, podéis consultar el análisis que publicamos en Vandal cuando se lanzó.