Un juez de los Estados Unidos ha declarado que Nintendo ha estado usando una tecnología de cámara patentada por la compañía Tomita sin pedir permiso, motivo por el cual ahora Nintendo tendrá que dar parte de los beneficios que obtenga con la consola a esta empresa.
En total, Tomita recibirá un 1,82% del precio de cada Nintendo 3DS vendida, una cifra que puede no parecer demasiado impresionante, pero si consideramos los números que mueve esta portátil, supone unas pérdidas considerables para Nintendo. Esta sentencia se aplicará hasta el final del ciclo de vida de la consola.
Nintendo 3DS está gozando actualmente de un gran éxito de ventas en todo el mundo gracias a su creciente catálogo, suponiendo actualmente la principal fuente de ingresos de Nintendo, ya que Wii U todavía no ha conseguido terminar de despegar.