Satoru Iwata, presidente de Nintendo, ha defendido el bloqueo regional que se sigue empleando en sus consolas domésticas y que, contra todo pronóstico, ha introducido también en la portátil Nintendo 3DS.
"Desde la perspectiva de algunas personas, puede parecer una restricción. Sin embargo, esperamos que la gente aprecie el hecho de que vendemos nuestros productos en todo el mundo", señala el ejecutivo.
"Hay muchas regiones diferentes por todo el mundo, y cada una tiene sus restricciones legales y condicionantes culturales, así como diferentes sistemas de clasificación por edades. Hay siempre cosas diferentes que se nos requieren para región, lo que puede ir contra la idea de los jugadores de todo el mundo de jugar lo que ellos quieran".
Pese a estas razones, tanto Sony como Microsoft (que iba a mantener uno incluso por países, pero fue eliminado en su cambio de políticas por las quejas de los usuarios) han apostado por eliminar el sistema de restricciones regionales en sus consolas, si bien es cierto que las editoras pueden optar por introducirlo si así lo quieren.
Hay en marcha una petición en línea para pedir a Nintendo que descarte este bloqueo regional.
