Masahiro Sakurai, creador de Super Smash Bros. o Kid Icarus: Uprising, asegura que las historias que "como jugador, como alguien que ha estado jugando durante mucho tiempo, las historias que se cuentan en los videojuegos normalmente me molestan".
"Por ejemplo, los juegos que se llevan una vida para terminar la intro y no te dejan empezar a jugar [...] Yo sólo quiero disfrutar del juego, y creo que soy bastante intolerante con los aspectos que bloquean la diversión. Puedo disfrutar de una historia en cualquier otro tipo de formato; ¡sólo quiero que me deje jugar!"
Sakurai asegura que por ejemplo, en juegos de rol, que por la historia muera un personaje sin que tú hayas hecho nada para ello, es penalizar a un jugador que no ha cometido ningún error, algo que califica de "sinrazón".
Por último señala que "la historia de un juego tiene que encajar con el contenido y la jugabilidad. En un mundo ideal, podríamos aprovechar esto para ofrecer desarrollos argumentales que nunca serías capaz de ver en otro formato".
