La cadena de tiendas británica HMV ha anunciado que se declarará en concurso de acreedores y pasará a depender de gestión externa con efecto inmediato. Esto podría poner en peligro los 4.000 empleados de la cadena de tiendas.
"Es probable que el grupo no pueda cumplir con sus compromisos bancarios a finales de enero de 2013", como han reconocido en un comunicado remitido a los medios ingleses y han iniciado unas negociaciones con los mismos. Otras negociaciones están en marcha "con los principales accionistas" para "intentar solucionar la inminente bancarrota".
Siguiendo la legislación británica, la empresa pasa a gestión externa. Esta gestión podría acabar en manos de Nick Edwards, Neville Kahn y Rob Harding, de Deolitte LLP. Ellos serán los encargados de encontrar una solución financiera para pagar a los acreedores. Esto implica estudiar opciones para salvar a la empresa tomando las medidas que sean necesarias (venta de activos, propiedades, despidos, etc.), o la clausura de la empresa y venta de sus bienes o recursos, como por ejemplo filiales.
Las primeras especulaciones recogidas en medios financieros apuntan a que la firma de inversiones Apollo Global Management, de capital estadounidense, podría comprar la empresa. Este grupo tiene un 6% de las acciones de la compañía británica.
El grupo representa un importante punto de venta en videojuegos, cine (un 27% del total de DVD y Blu-ray que se venden en Reino Unido) y música (un 38% del total).
