Ivan Buchta y Martin Pezlar, los desarrolladores del juego ArmA 3, parte de Bohemia Interactive, detenidos en Grecia, tendrán que enfrentarse finalmente a un juicio al no haber sido aceptada su apelación. Están acusados de espionaje cuando fueron sorprendidos fotografiando instalaciones militares en la isla de Lemnos, según las autoridades griegas.
Las condiciones de los detenidos
Uno de los padres de los detenidos, Buchta, ha explicado a medios locales checos que las condiciones de la celda en la que están encerrados desde hace ya más de dos meses están lejos de ser óptimas. "Están en una celda con más de 25 personas y duermen en el suelo", ha explicado.
La madre del otro detenido, Pezlar, afirma que "nuestros chicos ya no nos dicen que están bien, que lo están aguantando. Después de la decisión del juez lo único que oímos es algo que ningún padre quiere oír: 'mamá, papá, salvadnos'".
Buscando apoyo político
Las familias de los detenidos han llevado el caso ante el presidente de la República Checa pues creen que los políticos del país podrían mediar en la situación, aunque de momento no están satisfechos con las declaraciones del ministro de Asuntos Exteriores del país, quien afirmó que "estamos trabajando en este asunto desde todos enfoques posibles".
Los dos desarrolladore pueden enfrentarse a una pena de hasta 20 años de prisión.
