Tomasz Gop, uno de los antiguos responsables de la saga The Witcher ha fundado un nuevo estudio con el que quiere intentar asaltar un trono que ahora mismo tiene un durísimo competidor: la saga Dark Souls. Lords of the Fallen es un juego que no oculta su inspiración, y que quiere convertirse en un título de acción y rol cuya dificultad se eleve hasta límites inesperados a la vez que se consigue convertir en una experiencia adictiva y satisfactoria para el jugador.
Lords of the Fallen es un juego en tercera persona que nos lleva a superar complejos combates, mientras exploramos y mejoramos a nuestro personaje y descubrimos una historia que promete tener bastante peso. En este título encarnamos el papel de un humano llamado Harkyn que tendrá que embarcarse en una aventura para evitar que una fuerza sobrenatural arrase el mundo. Sobre la historia, podremos tomar decisiones a lo largo de la aventura que alteren el mundo y cambien la historia del juego.
En la demo pudimos probar tres tipos de personajes, Warrior, Cleric y Rogue, los cuales, obviamente, ofrecen diferentes sistemas de combate que además podremos personalizar posteriormente gracias a completos árboles de habilidades para cada uno. Nos comentaron que cuando nos pasemos el juego, podremos combinar dos clases con la Nueva Partida+, y de las tres si repetimos con la Nueva Partida++, lo que puede abrir una interesante puerta para la rejugabilidad.
Es curioso cómo la demostración consistía prácticamente en cruzar un puente hasta llegar al jefe final, pero derrotar a los dos enemigos que nos aguardaban entre el inicio y éste ya era un desafío importante. De hecho, el primero era inmortal y sólo podíamos noquearlo, y al segundo ya sí que podíamos eliminarlo. Viéndonos ahí en medio del combate sin ninguna información previa, tuvimos que poner en práctica todo lo que habíamos aprendido con Dark Souls para salir airosos, ya que el sistema de combate es bastante parecido.
Cuando morimos, la experiencia acumulada se queda "flotando" en el sitio donde perdemos la vida, y en función de lo que tardemos en llegar de nuevo hasta esa zona podremos recuperarla al 100 por cien o no recuperar nada, con todos los porcentajes comprendidos entre ambas opciones. La zona que jugamos era bastante limitada, e incluso había un punto de control después de derrotar a los dos enemigos para que no tuviésemos que cruzar el puente tras la más que predecible muerte al batallar contra el jefe.
En la pelea, el jefe nos dio la paliza previsible, aunque poco a poco, con cada reintento, éramos capaces de ir desarrollando nuevas estrategias de combate, ir esquivando mejor sus impactos y aprendiendo a ser más efectivo con la energía del personaje. No llegamos a derrotarlo, pero sí es cierto que nos quedamos la sensación de que podríamos haberlo conseguido con algunos intentos más.
Reiniciamos la demostración para probar Lords of the Fallen con otra de las clases, y nos sirvió para descubrir que antes de llegar al jefe había una pequeña bifurcación que antes nos había pasado desapercibida, y que, a costa de derrotar a algunos amigos más, nos permitía alcanzar al boss por la espalda, apuntándonos un par de golpes que lo pillaron de imprevisto. No sabemos cómo de amplio y variado será el mundo, pero si la demostración es representativa, podemos esperar multitud de diferentes caminos con objetos y más batallas que encontrar por los alrededores.
En lo visual, Lords of the Fallen es bastante notable, aunque principalmente por su ambientación oscura, medieval y fantástica. La verdad es que para ser exclusivo de la nueva generación y PC esperábamos un poco más, pero cumple con creces en el diseño y esto ayuda a tapar su modestia técnica. Los escenarios, personajes y enemigos nos parecieron muy atractivos y acertados, y estamos seguros de que encontraremos algunos momentos para recordar cuando progresemos.
Nos preocupó un poco más que a dos meses de su lanzamiento hubiese bastantes bugs, sobre todo en la detección de escenarios. Los desarrolladores que nos acompañaban en la demostración estuvieron muy atentos en todo momento de los errores que encontramos, por lo que quizás el juego están preparándose ahora para pulirlo.
Un título que viene a encajar perfectamente en un género en expansión
Simplemente elevando su dificultad hasta "el infinito y más allá", Dark Souls instauró casi un nuevo género dentro de los juegos de rol y aventura, demostrando claramente que hay gente que quiere verdaderos desafíos y disfrutan superándose a sí mismos. Ahora, Lords of the Fallen viene a tomar el relevo mientras llega una tercera parte de la saga o el sucesor espiritual Bloodborne, y pensamos que a pesar de no ser demasiado original o no dar un salto técnico demasiado grande puede satisfacer a los que tienen ganas de algo parecido a la saga de From Software.
En definitiva, Lords of the Fallen es un juego que apuesta por una fórmula conocida y la modifica más bien poco para evitar salirse de una senda que parece conducir al éxito. No tenemos la sensación de que vayamos a ver nada nuevo aquí, pero si eso no es un problema para vosotros, probablemente Lords of the Fallen no os decepciones.
