Análisis de Street Fighter III: 3rd Strike Online Edition PSN (PS3, Xbox 360)

Es indudable que en los últimos años los juegos de lucha bidimensionales están viviendo una segunda juventud. Siendo más concretos, desde la salida de Street Fighter IV. Juegos como el reciente y satisfactorio Mortal Kombat, el controvertido Marvel vs Capcom 3, los magníficos BlazBlue o Tatsunoko vs Capcom así lo atestiguan.

Sin embargo, la cuarta entrega de Street Fighter y sus revisiones Super y Arcade Edition, son los juegos actuales de este género que más éxito a nivel comercial han cosechado, con una gran comunidad de fans que los apoyan jugando online cada día. Aun así, este último capítulo de la saga de Capcom, para los más puristas y profesionales, sigue estando un peldaño por debajo de su antecesor en lo que a nivel competitivo se refiere.

Es por ello que tras las demandas de los aficionados, llega Street Fighter III: 3rd Strike Online Edition a Xbox Live Arcade y PlayStation Store, en un momento donde el público empieza a recelar de la política de Capcom de sacar continuas revisiones de este tipo de títulos pocos meses después de lanzarlos.

Hadokens, paradas y profundidad de juego a partes iguales

Como su propio nombre indica, Street Fighter III: 3rd Strike Online Edition se trata de una versión con opciones online de Street Fighter III: 3rd Strike, la segunda y última revisión que recibió la tercera parte de la serie en el 2001.

Su sistema de combate se basa como viene siendo habitual en seis botones de ataque, puñetazo débil, medio y fuerte, y lo mismo con las patadas. A raíz de aquí tenemos dos tipos de luchadores, los que hacen ataques especiales de carga y los que para hacerlas tienen que introducir comandos haciendo cuartos de luna con el stick. Si pulsamos dos botones del mismo tipo que la técnica nos pida, potenciaremos el ataque especial y consumiremos parte de nuestra barra de energía. También podremos realizar agarres y super saltos.

Además, cada luchador contará con tres tipos de super ataques distintos, entre los que tendremos que escoger uno antes del combate. Dependiendo de su potencia nos darán más niveles acumulables o menos para nuestra barra de energía.

Una cosa clara que hay que tener en cuenta, es que para que las técnicas se ejecuten, tendremos que introducir los comandos estrictamente tal y como son. Esto es algo que a pesar de su aparente simplicidad, nos obligará a practicarlos muchas veces hasta conseguir mecanizarlos, por lo que el uso de un Arcade Stick se hace algo especialmente recomendable para ganar seguridad y fiabilidad en este sentido.

Uno de los pilares básicos y exclusivos de la jugabilidad de este título es el sistema de paradas que incluye. Si pulsamos hacia adelante para los ataques altos o hacia abajo para los bajos en el momento justo en el que recibiríamos un impacto, haremos una parada, lo cual nos evitará sufrir cualquier tipo de daño y nos permitirá contraatacar. Se pueden hacer paradas tanto a los golpes normales como a las técnicas y a los super ataques. Tienen que realizarse en el instante justo y preciso para que tengan efecto y también pueden hacerse en el aire.

Este sistema permite que con mucho entrenamiento, nos vayamos aprendiendo todos los movimientos de nuestros rivales para saberlos parar y contrarrestar, añadiendo un plus de técnica y profundidad al sistema de juego muy satisfactorio y que no tiene ninguna otra entrega de la serie.

En lo referente a la plantilla de personajes, nos encontramos probablemente con la más variada vista en la saga. En total son 19 luchadores con estilos de combate muy variados, distintos e incluso raros y extravagantes en algunos casos. Además, muchos de ellos son exclusivos de esta entrega y de los clásicos apenas nos encontraremos alguno, como Ryu, Ken, Chun Li o Akuma.

Si bien es cierto que para esta ocasión se ha realizado una revisión de todos los personajes para buscar un equilibrio mayor, la verdad es que aún existen ciertos personajes ligeramente por encima de la media y que desequilibran un poco la balanza, algo que esperamos que ajusten en futuros parches.

Respecto a los modos de juego, además del clásico Versus, nos encontramos con un modo Arcade, en el que deberemos ir superando diversos combates, hasta llegar a la lucha contra nuestro rival y finalmente contra Gill, el jefe final del juego. Este enemigo será de armas tomar y nos pondrá las cosas realmente complicadas, con un alcance abusivo, técnicas demoledoras e incluso con la capacidad de volverse a levantar en el mismo round cuando conseguimos tumbarlo. Por desgracia no hay ningún tipo de historia que dé sentido a estas peleas, más allá de las olvidables y carentes de interés secuencias finales de cada personaje.

En general el nivel de dificultad de esta entrega es bastante alto y exigente, pero también es cierto que tras cada combate iremos notando como vamos mejorando, aprendiendo a parar los ataques del contrario y dominando el sistema de juego poco a poco, algo que nos animará a seguir jugando.

También se incluye un nuevo modo en el que nos pondrán a superar diversas pruebas, como realizar paradas a ciertos ataques, vencer al rival en nivel de dificultad experto empezando con poca vida o realizar diversos combos con cada personaje. Este modo resulta especialmente útil para los no iniciados, ya que nos enseña muchas cosas de la mecánica de juego. Lo que resulta una pena es que sólo haya cinco pruebas por categoría, y aunque completarlas todas nos llevará muchas horas, se antoja un número algo escaso en relación a lo que hemos podido ver en otros títulos.

Además de todo esto, se han añadido una serie de desafíos, que vendrán a ser algo así como un equivalente a los logros del juego, pero en mayor número y que nos recompensarán con puntos que podremos invertir posteriormente en desbloquear contenido en la galería de arte y música.

Entrando ya en los modos multijugador, Street Fighter III: 3rd Strike Online Edition está muy bien surtido, con múltiples opciones para personalizar las partidas. Podremos participar en partidas igualadas con reglas prefijadas para subir puestos en el ranking mundial, partidas de jugador con salas de hasta ocho personas, tendremos la posibilidad de ver los combates en modo espectador y de crear torneos. Hasta podremos guardar las repeticiones de nuestros combates y subirlas a YouTube.

En cuanto a su rendimiento online, esta revisión funciona a las mil maravillas, con partidas con un lag prácticamente inexistente. Eso sí, algunas partidas presentaban un mínimo de lag que aunque en cualquier otro juego habría sido imperceptible, mermaba la experiencia tremendamente al depender de un sistema que requiere de un timing tan preciso y estricto para realizar cualquier acción. Pero como decimos, la tónica general es la de jugar partidas en excelentes condiciones. Habrá que ver de todas formas si cuando se llenen lo suficiente los servidores aguantarán el tirón o no.

Un apartado técnico apenas retocado

Street Fighter III: 3rd Strike Online Edition como novedad ofrece gráficos en alta definición, con opción de elegir entre tres tipos de filtros distintos y del tamaño de la pantalla. Sin embargo, aún se siguen notando muchos pixels y los escenarios se ven demasiado borrosos, dando la impresión de que Capcom se ha esforzado bastante poco con este apartado. Lo que sí que sigue luciendo de maravilla son las animaciones de los personajes, demostrando el buen hacer que tuvo la compañía en su momento, ya que diez años después siguen siendo muy fluidas y gratificantes.

Donde sí que habríamos agradecido una revisión total es en su apartado sonoro, ya que la banda sonora es machacona, sin ninguna clase de inspiración y que llega a resultar hasta molesta. Las voces tampoco se han modificado, por lo que su calidad de sonido sigue siendo la de antaño y no resultan del todo nítidas.

Conclusiones

Nos encontramos ante magnífica adaptación a los tiempos actuales de uno de los mejores títulos de lucha bidimensional, y con un modo online más que competente para podernos medir con jugadores de todo el mundo. Complejo, técnico y profundo, Street Fighter III: 3rd Strike Online Edition supone todo un regalo para los fans más exigentes del género, que encontrarán aquí un juego ideal en el que invertir muchas horas de entrenamiento y competición al más alto nivel.