Análisis de Madden NFL 2004 (PS2, PC, GameCube, Xbox, Game Boy Advance, PS One)

Para qué os voy a engañar, servidor se encuentra entre la gran mayoría de ignorantes de este deporte. He visto partidos por mera curiosidad y nunca he sido atraído por él, pero si la crítica estadounidense se vuelve loca con este deporte y las ventas que alcanza cada entrega de Madden lo convierten en un rotundo éxito, estoy en la obligación de darle una oportunidad. Una misión pendiente de cualquier compañía con ansias de vender un juego tan peculiar en todo el mundo es la de dotar dicho juego de una accesibilidad que lo haga disponible para cualquier tipo de público. EA consigue cada año con su saga divertir al más novato (y con ello aumentar la curiosidad entre la gente que lo rodea) con una sencillez digna del divertidísimo Football Frency de Neogeo, sin dejar de lado, claro está, la exigencia y el toque de realismo del proyecto más ambicioso.

El apartado gráfico de Madden 2004 es sin duda uno de los aspectos más destacados del juego. Para no perder la costumbre, la compañía canadiense dota a todos sus títulos de los mayores avances técnicos. Esta saga ha sido y es de las más beneficiadas. Los jugadores han sido recreados con extrema fidelidad gracias a la gran cantidad de polígonos que poseen, y tienen detalles brillantes como los reflejos en los cascos y la posibilidad de reconocer caras desde una cámara lejana. Los movimientos son perfectos y fluidos (la captura esta vez no ha provocado ningún resentimiento en la transición de los mismos ni en la estabilidad del framerate). Las colisiones son escalofriantes y las cutscenes logran meter de lleno en el partido. Los estadios, perfectamente modelados, son sin embargo el punto menos agraciado de Madden por culpa de las pobres texturas. En definitiva, el uso del mismo motor visto en Madden 2003 con mejoras traducidas en simples arreglos y detalles insignificantes, elevan esta nueva entrega al limbo del realismo y la espectacularidad. Quizás el sonido en este juego es más importante que el apartado visual. Sinceramente, es uno de los puntos que más me ha sorprendido y ha provocado en más de una ocasión que subiese el volumen de mi equipo para vivir lo máximo posible uno de los condimentos imprescindibles que convierte al fútbol americano en un show.

Los choques que se dan entre cualquiera de los 21 superhombres que corren en el terreno de juego son sobrecogedores. Los crujidos y demás sonidos de los placajes han sido representados con gran realismo y nos pondrán los pelos de punta en más de una ocasión. El público y en general todo el escaparate de este deporte es un añadido agradable que consigue con creces la misión de hacernos creer que estamos dentro de uno de estos ya considerados acontecimientos. La banda sonora vuelve a deslumbrar; los chicos de EA lo han bordado este año y como en el resto de sus títulos han conseguido una selección de temas perfecta. El punto negro quizás se encuentra en la pobreza de los comentarios. Madden hace de apuntador y repite constantemente las mismas frases. Al Michaels, por el contrario, mantiene un nivel decente en la narración sin caer en la monotonía, pero eso sí, no llegan a la brillantez de Fifa 2004 y los reconocidos comentaristas de la SER.

Como dije en el párrafo introductor, EA se ha encargado de pulir una jugabilidad accesible para cualquiera sin dejar de lado las exigencias de los fanáticos más acérrimos. Las novedades de la entrega del 2004 se centran en el apartado jugable y una de las más importantes es el novedoso e intuitivo "PlayMaker Feature". Con este sistema, en defensa, con el stick derecho activaremos al jugador para poder tapar cualquier hueco posible para el receptor y corregir posiciones sin necesidad de un audible. En ataque nos permitirá, por ejemplo, ayudar en los bloqueos para dejarle vía libre al runningback. Es decir, el "off the ball" de Fifa 2004 trasladado al fútbol americano con todos los problemas orientativos que conlleva (es realmente complicado esquivar con el runningback mientras usamos el otro hemisferio del cerebro para guiar a otro jugador hacia el defensa). Se trata de una novedad muy importante y de agradecer, pero como pasa en Fifa, es muy complicado dominar este sistema y nos será de utilidad a la larga. Los modos de juego son numerosos y variados:

- Franchise: El modo de liga de cualquier juego deportivo. Es decir: lleva a tu equipo favorito a la gloria empezando desde cero. Mantiene y añade nuevas posibilidades de gestión económica gracias a un submodo llamado "Owner".
- Tournament: Aquí puedes personalizar un clásico torneo entre todos los equipos disponibles de la NFL.
- Mini-camp: Especie de tutorial con pequeñas pruebas que ayudan enormemente a hacerte con los controles básicos.
- 2 minutes drill: Curioso modo que nos invita a hacer el mayor número de puntos posibles en un período de 2 minutos continuos de ataque.
- Football 101: Madden nos enseñará a jugar (sobre todo tácticamente) en esta otra versión del tutorial bastante más avanzada.
- Practice: Entrenamiento libre sin ningún tipo de restricción. Aquí podemos ensayar jugadas tanto en ataque como en defensa.
- Situation: Directamente sacado del modo "Scenario" de los ISS de Supernes. Esta vez las situaciones a las que nos enfrentamos son tan intensas como la de tener 10 yardas por delante hasta el touchdown en plena Super Bowl con tan sólo 30 segundos de tiempo para la finalización del partido y un marcador que justamente remontaríamos si logramos completar la jugada.

El modo estrella es el modo de Franquicia. Aquí podemos manejar completamente a nuestro equipo favorito de la NFL con amplias posibilidades como la de participar en el draft, entrenar a jugadores promesa, etc, con el fin de llegar a ganar la Super Bowl y con ello convertirnos en el equipo más prestigioso. Aquí no acaba todo y una de las mayores novedades es la inclusión de un submodo llamado "owner" que como su propio nombre indica nos hará propietarios del club. Si con llevar las finanzas básicas como es la contratación de jugadores ya nos agobiamos, imaginad hasta dónde llega el nivel de control con la opción de tener que gestionar cosas tan ínfimas como el precio de las entradas, de las consumiciones, etc. Todo esto influirá en el prestigio del equipo y tendrá consecuencias tan grandes como los cambios de ciudad y estadio si las cosas no van como deseamos o que los grandes jugadores rechacen nuestras ofertas por ser un equipo muy pequeño.
Es un verdadero caos (divertidísimo, eso sí) que sólo es aconsejable para el aficionado más radical de este deporte. Otras novedades menos destacables son:
- la vuelta de las Madden Cards: trucos y bonificaciones que obtendremos si conseguimos algún reto específico como correr cierto número de yardas. En anteriores entregas este modo se conocía como "reto madden".
- camp-drills: pruebas con las que conseguiremos puntos para aumentar los stats de los jugadores.
El objetivo y esencia de Madden 2004 y del fútbol americano en general es la urgencia por correr tantas yardas como podamos. Tenemos dos opciones bien claras para cumplir la misión principal, éstas son las jugadas de pase y las de carrera. Con nuestro Quaterback controlamos el balón nada más realizarse el snap y debemos elegir el receptor para lanzar el pase con un sencillo sistema de elección mediante botones encima de cada jugador. Las de carrera se basan en un Runningback kamikaze que intentará por medio de una carrera (y los botones R y L para estorbar a los caníbales que intentan derribarnos) avanzar tantas yardas como podamos antes de recibir un placaje.

Para desarrollar estos dos tipos de jugadas disponemos de un gran número de tácticas predefinidas y espacio suficiente para personalizar nuestras creaciones. Probablemente es lo que menos entiendo de este deporte y un gran quebradero de cabeza. La elección de la jugada es bastante simplista (hay un "botón Madden" que elige por nosotros una supuesta mejor opción) y la dificultad reside en acordarse de los botones que debes apretar para llevarla a cabo, porque hay una inifinidad de posibilidades y puede que nos resulte prohibitivo durante los primeros días debido al poco tiempo que tenemos para reaccionar cuando el Quaterback recibe el balón.

Los iniciados como yo lo hemos pasado bastante mal porque ni siquiera se han traducido los menús. Es incomprensible que EA quiera invadir terreno europeo con un juego tan peculiar y no recuerde que de momento no existe un idioma único en el mundo y somos incapaces de descifrar tecnicismos propios de ese deporte sin un fan a nuestro lado.

EA ha conseguido evolucionar este año con todas sus sagas, sobre todo con los tres deportes estrella: fútbol, fútbol americano y baloncesto. Madden 2004 no es una excepción y nos sirve perfectamente de contacto para los principiantes, a la vez que es una pieza obligada de coleccionista para todo fan del deporte que se precie. Espero que el año que viene se preocupen por traducir el juego, añadir las cada vez más habituales opciones online y adaptar más si cabe el concepto del juego para nuestro mercado (un modo arcade nos ahorraría problemas a los novatos). Como competidor, el juego de EA cuenta con un rival tan duro como la nueva entrega ESPN de Sega, lo que crea una disputa similar a la de los dos famosos juegos de fútbol que todos conocemos. Ya sabéis, si sois fans os sentiréis halagados por tener dos grandes títulos del género a vuestra disposición. Si por el contrario pertenecéis a la gran mayoría, al menos intentad adentraros en este deporte, que Madden es la mejor opción. Con amigos es muy recomendable y muy divertido, sobre todo porque vas aprendiendo a base de no enterarte de nada.