Análisis de Men of War: Assault Squad (PC)

Men of War: Assault Squad es la última entrega de la franquicia Men of War, una de las sagas más veteranas en la historia de la estrategia en tiempo real. Desde 2004, es una franquicia que lleva reinventándose, mejorando e intentando adaptarse a los nuevos tiempos y exigencias por parte de los usuarios. Su base jugable y sus propuestas, han conseguido que decenas de títulos de diferentes franquicias o sagas acaben fijándose en ello como referencia para avanzar y adaptar sus juegos y entregas más recientes a los gustos más actuales. Men of War, videojuego lanzado en 2009, fue verdaderamente la pieza del puzle definitiva, la que consiguió impulsar la propuesta inicial de Soldiers: Heroes of World War II a unas cuotas de calidad suficientes, como para iniciar así una saga o subsaga propia que llega hasta el presente Assault Squad, que acaba de llegar a las tiendas de nuestro país.

Assault Squad nace como expansión pero se siente un juego totalmente completo e independiente. Sus cambios en la mecánica, su faceta realista o sus detalles, son los que definen su personalidad como videojuego.

Cuando éramos soldados

Assault Squad, se centra en el control de los escuadrones de infantería. No es que se dejen el resto de las unidades atrás (hay más de 300 unidades y vehículos diferentes completamente reales, con un aspecto y un cuidado histórico que quita el hipo), pero sí es cierto que las protagonistas absolutas son las unidades de soldados. Era un concepto visto en la anterior entrega principal, y que aquí toma una relevancia táctica y jugable, que consigue meternos de lleno en la batalla. ¿Por qué? Porque nos sentiremos realmente dirigiendo un escuadrón (o varias decenas de ellos) a lo largo del campo de batalla.

Assault Squad, sigue el planteamiento que tanta fama y reconocimiento le otorgó al Men of War original: libertad de acción en la resolución de los conflictos. ¿Qué quiere decir esto? A diferencia de la mayoría de juegos de estrategia de tiempo real, donde el usuario se limita a recolectar diferentes recursos por el mapa para crear unidades, y donde se premia la guerra de desgaste y la aniquilación total, Men of War apostó por dotar de libertad al usuario. Esta libertad se basaba en la oportunidad que tenía el jugador de controlar unidades por el mismo, tomando el control de los soldados de forma independiente, así como planeaba las estrategias y movimientos globales como si de un juego al uso del género se tratase. Al añadir tantas variantes, nos encontrábamos con un juego divertido, lleno de maneras y alternativas con las que superar una misión en concreto. Assault Squad, obviamente, y antes las buenas críticas (tanto por parte del público como de la prensa especializada), vuelve por los derroteros de la elección total en el plano jugable, y eso se agradece.

Los más novatos, tal y como comentamos en nuestras extensas impresiones, quizás se sientan algo desorientados ante tal libertad, y es que Assault Squad exige y necesita, varias horas de aclimatación para su sistema. Ojo, eso no es para nada pesado o traumático, ya que el juego se deja jugar sin necesidad de experiencia desde el primer minuto (la interfaz y la primera misión son claras y sencillas para tomar el pulso al juego), pero si advertimos de que Assault Squad es un título que se disfruta bastante habiendo tenido más de una batalla a nuestras espaldas.

Este Men of War: Assault Squad no tiene un modo campaña propiamente dicho, y basa su principal estructura para el jugador en solitario, en una serie de niveles diferentes entre sí, que tienen como ambientación diversas batallas y operaciones reales en la Segunda Guerra Mundial. Es el modo Escaramuza, donde según escojamos nuestras fuerzas (alemanes, japoneses, rusos, estadounidenses o británicos) nos enfrentaremos a unos escenarios u otros. La duración de dicho modo de juego es amplia, ya que dada la libertad con la que podemos afrontar las misiones juega a favor de dicho sentido. Podemos encontrarnos escenarios que nos darán más de un quebradero de cabeza, y es que las 16 misiones disponibles son muy variadas, tanto en objetivos, como en la forma de ponernos a jugar en cada una de ellas.

Estos escenarios individuales históricos, nos llevarán a diversos puntos de la geografía mundial durante la segunda gran guerra, ya que lo mismo combatiremos en zonas desérticas del norte de África como en las inmensas campiñas de Centroeuropa o en las peligrosas costas y ciénagas de las islas del Pacífico. Esta variedad de localizaciones consigue que el jugador nunca se aburra, y que se vaya obligado a adaptar su forma de juego al escenario que le toca. Además, todos los niveles y mapas tienen un componente real, ya que se basan en sucesos conocidos por todos, como las batallas de Carentan, Caen, Iwo Jima o la famosa Operación Overlord.

Cada nivel tiene una serie de objetivos y requisitos que serán necesarios cumplimentar si queremos gozar de éxito en nuestra misión. Sobre ellos ya hablamos largo y tendido en las impresiones anteriores, pero os refrescaremos la memoria. Dichos objetivos, suelen ser posiciones y ubicaciones, que deberemos tomar con nuestras tropas (ya sea defendiendo o atacando). Dichos puntos de control están representados con forma de bandera, y solamente pueden ser tomados por unidades de infantería. El conquistar esta serie de lugares específicos nos abrirá la puerta a la consecución de los llamados puntos militares, que nos darán la posibilidad de conseguir o "encargar" refuerzos y mejores unidades para la batalla.

Los puntos militares estarán presentes desde el inicio de cada fase, y podremos invertirlos en diversos vehículos, así como en equipamiento o mejora de las unidades ya existentes. Y ojo, porque Men of War: Assault Squad ofrece una auténtica barbaridad de unidades diferentes. Las más de 300 unidades (la gran mayoría exclusivas de cada bando o facción) están recreadas con asombrosa exactitud y fidelidad. Ya sean tanques, jeeps o simples camiones destinados al transporte de tropas, el usuario verá reflejada una exacta réplica a escala del vehículo real en pantalla. Todo un trabajo de documentación histórica digno de ser elogiado.

El basar el sistema jugable en este tipo de objetivos consigue que el mapa de juego sea un ente cambiante, pudiendo estar una posición en nuestro control por un tiempo hasta que nos la arrebatan las tropas enemigas o viceversa. Es decir, al estructurar el juego de esta manera, se evitan los abusos y la falta de planificación, porque un fallo a la hora de destinar nuestras unidades en un determinado punto, o la masificación en otro, pueden llevar al traste la misión, y por consiguiente la partida entera. Hay que saber equilibrar la balanza, ya que estos puntos de control están distribuidos por toda la geografía, y permanecen durante el transcurso del tiempo de juego. Son eslabones de una cadena muy grande que nos lleva a la victoria, y si se rompen, no obtendremos beneficio alguno. Jugablemente, Assault Squad es, posiblemente, uno de los mejores juegos de estrategia del mercado. Además, cuenta con un modo multijugador bastante bien avenido, donde podemos disfrutar de dos vertientes: o jugar en modo cooperativo o en contra. Podemos crear partidas con hasta 8 jugadores en los diversos modos de juego disponibles.

Gráficamente, el juego es una evolución directa de su antecesor, aunque en términos generales, todo se ve de una forma nueva, más realista y tangible. Los escenarios y terrenos donde se desarrolla la acción están fielmente recreados, garantizando la ambientación de nuestras batallas. Si a eso le sumamos la variedad geográfica presente, tenemos un diseño que encandilará a los más fervientes devotos de los motores gráficos en juegos de este estilo, ya que la repetición de escenarios es un concepto que no se destila en Assault Squad.

Además, otro aspecto a destacar en la versatilidad del motor gráfico, que presenta elementos destructibles en tiempo real, como casas, vegetación... Este tipo de novedad en el motor gráfico, tendrá consecuencias jugables, ya que permitirá al jugador tomar dichas ventajas destructivas para su propio beneficio. Y las unidades, no se quedarán atrás. Sí, ya hemos hablado de las fieles recreaciones de las unidades militares y demás parafernalia mecánica, pero no podemos dejar pasar la oportunidad de volver a repetirlo: están muy bien hechas. Y es que, no todos los días puedes tomar el control en primera persona de un soldado y acercarte a vislumbrar el detalle y el mimo con el que se han tratado. ¡Un diez para los chicos de Digitalmindsoft!

Conclusiones finales: una hoja de servicios impecable

Assault Squad es un juego soberbio. Realmente bueno, a pesar de lo manido del género y su costumbrista ambientación. Su libertad de acción (donde podemos escoger cualquier tipo de unidad y ponernos a controlarla en el campo de batalla), su planteamiento de consecución de objetivos y su realismo gráfico y técnico, lo ponen fuera de toda duda. Es ciertamente, una opción a tener muy en cuenta si se quiere disfrutar de un juego de estrategia en tiempo real de calidad incuestionable. Si se está buscando un título del género realmente bueno, con detalles y un control lleno de posibilidades, no hay lugar para la duda: Assault Squad debe ser tu opción a considerar. Y a su hoja de servicios nos remitimos. Men of War: Assault Squad es distribuido en España por FX, que ofrece una edición totalmente en castellano y con una calidad fuera de toda duda (y a precio reducido).