Análisis de Bet On Soldier (PC)

Ochenta años de guerra continuada dan para mucho, sobre todo si ésta se ha convertido en un negocio rentable para todo el mundo: miles de soldados mueren todos los días en el frente, los ciudadanos trabajan sin cesar por mejorar las corazas defensivas y las armas que las puedan perforar; los ingenieros crean nuevos carros de combate cada vez más destructivos; y los productores de televisión se encargan de retransmitir a todas horas los distintos enfrentamientos librados entre los mercenarios apuntados al programa televisivo Bet on Soldier. En este show en directo, dos soldados equipados con la última tecnología armamentística se enfrentan a muerte en todo tipo de entornos con el único fin de salir con vida del combate, ganar una gran suma de dinero, y por qué no, conseguir que los ciudadanos también ganen fortunas con las apuestas ganadas.

En este contexto tan apocalíptico aparece Nolan Daneworth, el protagonista de esta creación del estudio francés Kylotonn, que no buscará el dinero en Bet on Soldier, sino que combatirá sin cesar hasta llegar a lo más alto del campeonato para hacer frente a dos de los tres asesinos de su mujer, los Boryenkas Brothers.


El sistema de juego en Bet on Soldier, como ya comentamos en el avance, combinará la acción más frenética de los juegos de acción en primera persona, con la estrategia y táctica vistas en otros títulos del género. Nosotros, como decimos, encarnamos a Nolan Daneworth, un mercenario que comienza su andadura militar tras unas trincheras en el continente europeo, y que debe escalar posiciones en el ranking mundial de Bet on Soldier con el único fin de terminar con la vida de los asesinos de su mujer. Para cumplir esta difícil tarea, Nolan tendrá que emplear sabiamente el dinero que ganará en cada uno de los niveles para equiparse con la última tecnología militar, contratar los servicios de otras unidades de combate, y reparar su armadura en medio de las partidas sin necesidad de contar con la ayuda de un ingeniero.

En Bet on Soldier el jugador podrá seleccionar libremente el escenario bélico en el que combatirá. Como comentábamos la aventura comienza en Europa, pero poco después se abrirán los escenarios en Nevada; y más tarde en Cuba y Alaska. En cada una de estas regiones encontraremos distintas "casillas" que podremos marcar para ver el dinero que hay en juego y sobre todo, el número de mercenarios adscritos al programa televisivo con los que nos encontraremos si optamos por ese nivel. Lógicamente, cuantos menos de estos súper soldados haya en un escenario más fácil nos resultará cumplir los distintos objetivos que se nos irán marcando. Y es que ante todo hay que tener en cuenta que esta obra de Kylotonn no se limitará exclusivamente a ofrecer combates entre mercenarios, sino que tendremos que abrirnos paso por una gran cantidad de niveles combatiendo a decenas de soldados mientras cumplimos los objetivos que se nos vayan encomendando, y llegado el momento, eliminar a los participantes del programa que aparezcan en pantalla. Para ello, como decimos, tendremos que equiparnos con lo último en materia militar, por eso, a continuación comentaremos el sistema de elección del arsenal.

Antes de comenzar la partida en uno de los escenarios seleccionados aparecerán una serie de menús que tendremos que explorar para seleccionar el equipamiento que llevaremos, las unidades de combate que nos acompañarán –no siempre estará activada esta opción-, y los mercenarios pertenecientes a la liga Bet on Soldier que podrán aparecer en el nivel si los escogemos. Lógicamente, nosotros tendremos que realizar esta selección pensando en el estilo de juego que vamos a desarrollar, es decir, si queremos eliminar a los enemigos a distancia tendremos que escoger el rifle de precisión; pero si optamos por los combates a corta distancia tendremos que desechar el rifle y coger una escopeta o lanzallamas. También la protección que llevaremos variará nuestro estilo de combate: podemos gastar una gran suma de dinero para equiparnos con la mejor coraza de todas y perder bastante velocidad, u optar por la coraza más barata y ligera para tener una movilidad bastante mejor.



Esta selección del equipamiento será de suma importancia en el desarrollo de la acción, ya que una vez hayamos iniciado la partida no podremos cambiar ninguna de las armas que hayamos comprado. En este sentido serán cuatro los espacios que tendremos que rellenar con distintas armas que irán desde el cuchillo a las distintas pistolas y ametralladoras, pasando por los rifles de asalto y precisión; y llegando por último a las armas más devastadoras: lanzamisiles –que podrán ser tóxicos, incendiarios, etc.- escopetas, etc. También podremos comprar tres granadas explosivas como máximo, y escoger otras tres que podrán ser incendiarias, cegadoras, o tóxicas. Por último, el jugador puede equiparse con un gran escudo que le protegerá de los disparos enemigos cada vez que vaya equipado con una de las armas de bajo calibre; aunque esta protección desaparecerá cada vez que seleccionemos una de las armas pesadas.

Como decimos, esta selección será muy importante para el desarrollo de la acción ya que los enemigos no dejarán sus armas y munición tiradas por el suelo cada vez que mueran. En Bet on Soldier la única manera de recuperar la munición la encontraremos en las distintas terminales repartidas por los escenarios que nos obligarán a pagar una buena cantidad de dinero por el armamento. También, nuestra coraza podrá ser reparada en estas terminales, previo pago, o gracias a la inestimable ayuda de los ingenieros que podremos contratar. Lógicamente, si no tenemos ingeniero o éste a muerto, la única opción que nos quedará será la de pagar por reparar nuestra armadura. Por supuesto, el encontrar este tipo de terminales se convertirá en uno de nuestros objetivos prioritarios, primero porque la salud que perdamos no la recuperaremos hasta finalizar la partida, y segundo porque habrá momentos en los que necesitemos de todo nuestro arsenal para terminar con los enemigos –cuando aparecen las máquinas de guerra enemigas, por ejemplo-. También, si lo que queremos es grabar la partida tendremos que encontrar las terminales específicas para esta función, y pagar otra buena cantidad de dinero para salvar nuestros progresos en el nivel.

Conforme vayamos eliminando a los enemigos, y siempre dependiendo del tipo de muerte que sufran, iremos ganando más y más dinero que luego emplearemos para las funciones citadas con anterioridad. Así, un disparo en la cabeza resultará más beneficioso para nuestros bolsillos que un simple disparo en el pecho. Lo mismo ocurrirá si eliminamos a varios enemigos a la vez con una granada, o si reventamos un barril y conseguimos que los soldados rivales salten por los aires. Estos, a su vez, contarán con un equipamiento muy parecido al nuestro, por lo que no será nada extraño encontrarse con unidades recubiertas por grandes corazas difíciles de perforar con las armas de menor calibre, y otros que irán menos protegidos pero que atacarán desde la lejanía con sus rifles de precisión. Por supuesto, del mismo modo que nosotros podemos castigar una zona del cuerpo enemigo, por ejemplo su cabeza, hasta el punto de reventarle la coraza y dejar la carne al aire libre; los enemigos podrán destrozar el peto de nuestra armadura y acribillarnos en ese punto hasta terminar con nuestra vida.

En este caso concreto, la interfaz que aparecerá en pantalla será de lo más intuitiva, mostrándose en la parte inferior de ésta nuestro nivel de salud y el tipo de coraza que llevaremos, y sobre el cuerpo de los enemigos, cada vez que pasemos el puntero sobre estos, un dibujo de la armadura que llevan con el tipo de daño que han sufrido hasta el momento. Así, dependiendo del color que se nos muestre sabremos si la coraza está intacta, si ha sufrido muchos daños, o si hay zonas concretas del cuerpo sin ningún tipo de protección. Nosotros, por ejemplo, podemos disparar sin cesar sobre la cabeza de un enemigo y ver como el dibujo del casco pasa de verde a amarillo, y luego a rojo. Si seguimos disparando al final la coraza caerá al suelo y podremos eliminar el rival disparando sobre la zona desprotegida. Eso sí, si nos ponemos a disparar después sobre el cuerpo no le quitaremos nada de vida hasta que esta parte de la coraza haya sido destruida.



También, como comentábamos antes, podremos contratar los servicios de otros soldados que realizarán distintas funciones en el campo de batalla. Así, un ingeniero podrá reparar nuestra coraza siempre que se lo ordenemos, el soldado raso luchará junto a nosotros en las distancias cortas, los soldados de precisión eliminarán a los enemigos en la distancia, y las unidades de protección avanzarán con sus grandes escudos cubriendo nuestra posición mientras nosotros eliminamos a todos los objetivos. El sistema de órdenes en este sentido no será para nada complejo, ya que solamente podremos pedirles a nuestras tropas que avancen, se queden quietas, o que reparen nuestra coraza.

Por último, antes de iniciar cada partida tendremos que seleccionar a los distintos participantes del programa de televisión Bet on Soldier con los que nos encontraremos. Habrá misiones en las que solamente tengamos que combatir contra uno de estos mercenarios, pero en otras tendremos que escoger hasta cuatro luchadores, cada uno con sus virtudes y defectos. Así, podremos combatir contra expertos en armamento pesado que no dudarán en lanzarnos todo tipo de proyectiles tóxicos que nos impedirán ver con claridad el entorno. También habrá otros que controlen las granadas cegadoras y las grandes ametralladoras, lo que hará que el combate directo sea casi un suicidio. Lo que nunca varía en este tipo de enfrentamientos es el escaso tiempo del que dispondremos para aniquilarlos. Como decimos, estos personajes aparecen cada vez que llegamos a una lugar concreto del nivel, momento en el que el eslogan del programa de televisión nos avisa del inminente combate. Tras conocer la historia del rival, y ver las distintas estadísticas del campeonato –el ranking, las victorias,...-, se iniciará la cuenta atrás que dará comienzo a la batalla.

En este tipo de enfrentamientos, gracias a dios, solo tendremos que combatir contra el rival, olvidando a cualquier otro contrincante que pudiera estar por la zona. Y decimos gracias a dios debido al alto grado de dificultad con el que nos encontraremos. Las misiones, que irán desde sabotear unas instalaciones enemigas a detonar complejos militares, serán de lo más complicadas; teniendo que luchar sin cesar contra decenas de enemigos que irán equipados con todo tipo de armamento y corazas, lo que hará que constantemente tengamos que ir cambiando la estrategia para eliminarlos. También habrá momentos en los que aparezcan tanques o grandes robots con una capacidad destructora impresionante, lo que nos obligará a movernos con rapidez para evitar sus fulminantes cañonazos. Eso sí, los enemigos también tendrán que sufrir nuestros ataques devastadores cada vez que montemos en uno de estos robots, ya que habrá misiones en las que será obligatorio pilotar una de estas máquinas de guerra para cumplir los objetivos.

El arsenal con el que nos encontraremos en Bet on Soldier estará compuesto por 40 armas distintas, cada una enmarcada en uno de los grupos citados con anterioridad –pistolas, rifles, armamento pesado, etc.-. Sin embargo, este amplio arsenal estará compuesto en su mayoría por armas muy parecidas que variarán en muy pocos detalles, es decir; podemos encontrarnos con una pistola muy barata y otra muy cara, y pensar que la más cara, lógicamente, tendrá una mejor potencia de disparo, más precisión y mayor alcance; sin embargo, en la práctica no será así. La mayor diferencia entre todas estas armas radicará, casi siempre, en el número de balas que podremos almacenar en sus cargadores. Así, la pistola más barata tendrá menos balas que la más cara, pero ni será más potente, ni tendrá más precisión. En todo caso mejorará el alcance de disparo, pero esto tampoco se puede asegurar ya que una pistola puede matar a un enemigo a muchos metros de distancia como si de un rifle de precisión se tratara. Otro punto que tal vez no guste a todo el mundo, aunque nosotros no lo consideramos un error, es el hecho de perder todas las balas de un cargador cada vez que recarguemos sin haber gastado toda la munición. Esta acción resulta bastante realista, ya que podemos malgastar un cargador completo si recargamos el arma tras haber realizado un simple disparo. Lógicamente, al tratarse de un juego en el que la munición es tan escasa, y será necesario comprarla constantemente, este hecho hará que más de uno se encuentre con grandes problemas a la hora de encontrar la suficiente munición con la que eliminar a los enemigos.



La inteligencia artificial de los enemigos y aliados también mostrará grandes contrastes. Por un lado disfrutaremos de unos combates contra decenas de enemigos que se cubrirán y escaparán siempre que vean que no tienen opciones ante nosotros. También se agruparán para atacar con mayor contundencia, y si es necesario, buscarán rutas alternativas para tendernos emboscadas. Sin embargo, estas mismas unidades a veces se bloquearán con algunos elementos del escenario, o se paralizarán mirando un lugar concreto del nivel, sin prestar atención al protagonista de la acción. Nuestros compañeros, por el contrario, no tendrán una inteligencia artificial tan agresiva como la de los enemigos, manteniendo, eso sí, algunos de los errores comentados con anterioridad. Como decimos, nuestros aliados no tendrán una inteligencia artificial tan refinada, por lo que se limitarán a disparar a todo ser viviente que se cruce por delante, teniendo la manía de colocarse en los perores lugares posibles para recibir todos los balazos enemigos. Por eso, no será nada raro ver como una granada cerca de nuestras tropas no hará que reaccionen, como sí hacen los enemigos; o como un barril a punto de estallar no les afecta en lo más mínimo a la hora de afrontar la nueva situación en la que se ven envueltos –se quedarán quietos-.

El motor gráfico también mantiene esta tónica de grandes virtudes y defectos, lo que hará que nos sintamos impresionados en algunos momentos de la aventura, y en otros, por el contrario, "disfrutemos" de ciertos errores gráficos que le restarán realismo al conjunto en general. Para empezar, los escenarios serán de grandes dimensiones, contando además con una buena cantidad de detalles que harán que en general sintamos de verdad estar en medio de la batalla. La variedad en estos entornos también será de lo más gratificante, pudiendo disfrutar de partidas en escenarios nocturnos con el fuego de la artillería pesada cubriendo todo el cielo; en zonas nevadas a la luz del día o en entornos urbanos en los que se combate tanto en las calles como en el interior de los edificios. Las texturas que poblarán todos estos escenarios tendrán un buen nivel de detalles, pudiendo disfrutar de algunas superficies metálicas de lo más impactantes.

Eso sí, también nos encontraremos con algunos elementos del escenario que aparecerán de repente ante nosotros, o montañas que se irán "dibujando" conforme vayamos avanzando por el nivel. Los efectos de luces, que incidirán de manera realista en las armas que llevemos, serán bastante buenos; aunque de nuevo encontraremos ciertos errores como ver un haz de luz sobre la cabeza del ingeniero cada vez que repare nuestra coraza que le restarán espectacularidad al conjunto. Las unidades también mantienen un elevado nivel de detalle, con un buen modelado y texturas en alta resolución. Sus animaciones, además, serán de lo más espectaculares, sobre todo en las de sus muertes: algunos saldrán volando y se quedarán sentados apoyados en una pared; otros cuerpos quedarán colgando en algunos tejados, y como no, otros caerán rodando por las escaleras. El juego sufrirá en ocasiones algunas ralentizaciones, incluso en equipos potentes, lo que es de lo más extraño ya que no estamos ante uno de los motores gráficos más potentes del momento.

El apartado sonoro en Bet on Soldier es de lo más discreto, contando con muy pocas melodías, que encima aparecerán en momentos muy puntuales de la partida; y con unos efectos especiales buenos, que no destacan en demasía comparado con otros títulos del mismo género que han ido apareciendo durante estos meses. Eso sí, el sonido que escucharemos cada vez que disparemos a un enemigo en la cabeza será de lo más desagradable e impactante; sobre todo cuando veamos la sangre salpicar las paredes y el suelo.

Por último, disfrutaremos del juego online con hasta 32 jugadores en una serie de escenarios que serán casi idénticos a los vistos en la campaña para un solo jugador. En estos mapas tendremos que seleccionar a una unidad concreta, equiparla con el arsenal perteneciente a su "profesión", y luchar junto a los amigos para eliminar al equipo contrario. En general se tratan de partidas muy divertidas que harán que sigamos disfrutando de Bet on Soldier tras haber completado el modo historia; aunque otros títulos del mismo género aparecidos durante estas semanas puedan hacer que sea difícil encontrar jugadores dispuestos a guerrear junto a nosotros.

Con todo esto, la nueva creación de Kylotonn se convierte en una opción recomendable para los seguidores de la acción más frenética con ciertos toques de estrategia, que disfruten con las nuevas ideas en un género cada vez más estancando. Tiene varios errores que lo alejan de la categoría de obra maestra, pero sí podemos decir que tanto su modo historia como el multijugador nos mantendrán varias horas pegados a los monitores.