Análisis de Catapult King (iPhone)

Catapult King -recientemente nombrado como juego de la semana por la selección editorial de Apple en su App Store-, es uno de esos títulos, de concepto simple y jugabilidad sencilla, que calan en varios cientos de miles de jugadores. Actualmente, y aunque pueda parecer lo contrario, en la App Store es muy difícil destacar con tantas propuestas de corte similar o idéntico. Catapult King, de Chillingo, no es especialmente original, pero funciona muy bien tanto en Android como en iOS y es extremadamente divertido. ¿Preparado para rescatar a la princesa de las garras del dragón?

Rescata a la princesa y derrumba el castillo

Catapult King comienza de la forma en la que empiezan casi todos los cuentos y gran parte de los videojuegos medievales o fantásticos de los últimos tiempos: la princesa de un lejano y maravilloso reino, acaba de ser secuestrada por las garras de un peligroso dragón. Nuestra misión, como es lógico, será rescatarla y de paso, destruir a sus legiones de secuaces. Catapult King hace suyos todos los tópicos de los cuentos de caballería e historias medievales, y les da la vuelta, convirtiéndolos en recursos humorísticos muy simpáticos ideales para el estilo desenfadado del juego.

Obviamente, Catapult King no tiene una historia forma, ni mucho menos interesante, pero sí es cierto que se agradece el estilo irónico y humorístico con el que está impregnado todo el planteamiento inicial. Una vez nos recuperemos de semejante mazazo -que nos secuestren a la princesa no es plato de buen gusto, y menos si lo hace un enorme lagarto escupe fuego de una tonelada de peso-, nos propondremos abrirnos pasos entre las legiones de acólitos y caballeros que se interpondrán entre el peligroso dragón y nosotros.

Para ello, haremos uso de una enorme catapulta que marcará diferencias y nos ayudará a tumbar a tantos soldados y castillos o construcciones como edifiquen. Y es que la mayor gracia y tesoro jugable al igual que lo fuera en Angry Birds -pese a que la presente app está completamente desarrollada en 3D-, será la de derrumbar los castillos y fuertes -de madera o piedra, como veremos más adelante- que construyan nuestros enemigos.

Como es lógico, cuantas menos balas y tiros utilicemos, mejor para nosotros, pues conseguiremos mejores puntuaciones y recompensas. Catapult King hace gala de 64 niveles distintos, que al igual que en otros juegos del género, estarán divididos por dificultad y ambientación, siendo los primeros muy fáciles y los últimos, todo un reto donde la suerte y la estrategia se deberán dar la mano para hacernos avanzar victoriosos. En cada nivel, tendremos una serie de caballeros errantes de lo más malhumorado sentados o protegidos por distintos tipos de bloques, ya sean de piedra, madera de diferente grosor y tipo, así como -llegados el caso- piezas metálicas.

El objetivo principal, antes que derrumbar y destruir toda la estructura, será el eliminarlos, ya sea mediante disparo directo o efecto colateral de la destrucción que podemos llegar a causar. Como juego enteramente táctil, disparar desde el iPhone, el iPad o cualquier dispositivo Android compatible, no será demasiado difícil. Con nuestro dedo pegado a la pantalla, iremos marchando y marcando ligeramente el camino hacia abajo para estirar las cuerdas y gomas de la catapulta, y si soltamos, veremos como el proyectil o bala sale disparado a nuestro objetivo.

Para calcular de forma más o menos correcta la trayectoria -realmente es una aproximación- la catapulta tiene una flecha blanca en su arco de disparo principal, que nos indicará la dirección que llevará el proyectil que estamos a punto de lanzar. Catapult King, más adelante, ofrecerá la posibilidad de modificar el grado de inclinación y parábola del disparo. Con una rueda mecánica situada en el lado derecho de la catapulta, iremos calculando el grado de cada lanzamiento, sirviéndonos para llegar más lejos o más cerca, en función de nuestros objetivos.

Cada castillo -y por lo tanto, cada nivel- tendrá una distribución geográfica única, con diferentes tipos de construcciones y distintos bosques, colinas, lagos o ríos. Tener en cuenta el tipo de nivel, y la esencia del castillo o fuerte al que nos enfrentamos, será esencial para tener éxito en cada lanzamiento y así conseguir el máximo punto de destrucción posible. La madera básica, llenas de cajas y tablones de cartón y demás materiales pobres, será muy fácil derribarla y destruirla, y encontrar los puntos débiles de la estructura será cuestión de poner un poco de ojo. Más adelante, nos las veremos con castillos de piedra y madera más sólida, que nos presentarán más resistencia a la hora de guardar y proteger a sus malvados caballeros. Es aquí, donde los proyectiles y la magia, harán acto de presencia.

La mayoría del tiempo, tendremos una serie de proyectiles básicos -de número variable según el nivel-, a los que les costará bastante derribar piedra o piezas más sólidas que la madera. Por eso, y cuando nos encontremos con frías y grandes murallas de piedra, Catapult King nos brindará la oportunidad de lanzar balas de cañón de metal, y llegados el caso, otras más especiales. Las balas de cañón traspasarán casi cualquier material, y serán de uso vital si queremos atravesar barreras naturales de cara a buscar algún que otro efecto "carambola" o dominó. ¿Por qué lo decimos? Catapult King, al igual que Angry Birds, esconde algunos secretos en cada nivel, como enormes piedras rodantes o explosivos, que tocados y destruidos de la manera pertinente, pueden crear grandes efectos de destrucción. Pero el mayor atractivo, serán las bolas mágicas.

Al superar cada nivel, Catapult King nos regalará una puntuación global -vía Game Center-, que será una media aritmética resultante de la suma del nivel de destrucción, de las bolas empleadas y de los secretos -como gemas, monedas- encontrados. Si hacemos los deberes, y somos capaces de descubrir muchos elementos, o de echar abajo los castillos con muy poco, podremos aspirar a acumular tarros de magia, que nos ayudarán a darle un poquito de vida al título. Esta magia añadirá efectos curiosos a las bolas, y las convertirá en verdaderas armas de destrucción masiva.

Desde lluvias de meteoritos lunares a bolas "terremoto", pasando por trayectorias mágicas que nos ayudarán a obtener más precisión, el elemento mágico es muy útil y necesarios llegados a los últimos niveles. Quizás, y paradójicamente, estas bombas mágicas no sean del agrado de todos, ya que bien usadas, pueden hacernos pasar un nivel de la forma más rápida y simple, pero repetimos, conseguirlas no es tarea sencilla y nos costará acumular un buen número de ellas. En ese aspecto, Catapult King parece bien balanceado.

Conclusiones finales

Catapult King no aspira a más que ser simplemente, un juego entretenido y divertido. Ofrece un desarrollo interesante, con una curva de dificultad ajustada y pausada, y añade al concepto ideado por Angry Birds, una nueva perspectiva y un apartado gráfico en tres dimensiones -que lo cierto es que funciona con una suavidad inusitada en dispositivos potentes como el nuevo iPad, el iPhone 4S o los últimos modelos Android de la serie Galaxy de Samsung-. De control depurado y perfilado, y con una jugabilidad a prueba de bombas, Catapult King es una alternativa fresca para todo aquel usuario de iOS y Android que quiera sustituir pájaros rabiosos y cerdos por caballeros y princesas.